“REQUIESCAT IN PACE”, AMIGO

Crónicas Hipatia CI

Imagen: PACO, Mallorca, 2025, Palou-Bosch.

Texto: M. Palou-Bosch

“REQUIESCAT IN PACE”, AMIGO

            Difícil será olvidarte, querido Paco. Complicado será seguir la vida sin tu especial presencia, sin nuestras conversaciones sobre la conducta de la gente, el comportamiento de la especie que convenimos en denominar “criatura humana”. Charlas descansadas, sosegadas sobre cuestiones complejas, a veces engorrosas y enrevesadas, casi deprimentes, sobre el estado del mundo, de nuestro país, de nuestra Isla, de nuestra ciudad, incluso del barrio; y de nuestros más cercanos y familiares, así como de nuestros propios asuntos.

            Cuántas veces me hiciste pensar, e incluso modificar mi opinión, con tu silencio de escuchante y tu posterior sutil sentencia. Aquella ironía inicial, seguida por tu particular “maieutikós”, como si fueras el mismo Sócrates.

            Y poco a poco, desde el primer día que te conocí, empecé viendo cuánto habías sufrido y cuánto seguías sufriendo. Sin embargo, eras capaz de transformar todo este dolor en ilusión para seguir viviendo; y, sobretodo, en rayos de ánimo para todos los que te rodeaban. Algunos entendieron la chispa de tus ojos; otros, intentaron aprovecharse de tu bondad.

            Pero el tiempo ha pasado. El tiempo siempre pasa, Paco, tú bien lo sabes. Y pude ver cómo, poco a poco, iba tu salud deteriorándose, de la misma manera que poco a poco me ilustrabas en conocer los significados del sosiego, la comprensión, la resignación, la tolerancia, la calma… Mejor eras que cualquier autorizado en tratar las almas, bien se tratase de tonsurados o galenos.

            Ahora ya puedes volar con las gaviotas y observar este mundo de la “criatura humana”. Ahora puedes jugar con las torcaces, el aire y el viento. Ahora, con todas las aves, símbolos de libertad, cruzarás boiras y nubes sin ningún temor. Ahora, como soberano de tu propio espíritu --parte de él traspasado para siempre en nuestros corazones-- cantarás a coro el mayo permanente de tu interminable primavera, que bien mereces. Ahora, siempre las flores pintarán en tu honor los campos y los jardines. Ahora, para ti, relumbrarán los ojos de los animales, de los hombres y mujeres, de las niñas y los niños. Ahora, para ti, titilarán las hojas de los árboles; no habrá ya planta caduca ni arbusto desnudo. Los torrentes y los ríos sólo llevarán el agua adecuada. Y las montañas y los bosques brillarán ya in aeternum para ti. Te deseo un reposo feliz con este humilde abrazo de palabras. Los que te queremos, seremos felices; y, quizás, más humanos con el amor que nos has dejado. Descansa en paz.

                                                      Julio, 2025, Mallorca