CONVERSANDO CON JULIETT PARÍS

"Las malvas de mi piel" 

de Juliett París

Saliendo del Amor Tóxico

Buenas tardes, Juliett.

Nos reunimos para poder hablar de tu obra ‘Las malvas de mi piel’, que está narrada en primera persona, lo cual invita más al lector a sumergirse en la historia de una pareja cuyo amor, cargado de toxicidad, pone de manifiesto no sólo la falta de comunicación, sino el apego, los celos y el control. Al leerla, te adentras en un mundo de mentiras y secretos, del cual la protagonista tiene que salir para sobrevivir y eso tiene que hacerlo con la única ayuda de su instinto y sus ganas de superación.  

J.M.: Antes de adentrarnos en tu obra, me gustaría que nos hablaras de ti, de tu lugar de nacimiento, de la ciudad donde resides, a qué te dedicas aparte de a escribir, qué es lo que te llevó a querer dedicarte a la escritura, y todo lo que pienses que es relevante para un primer contacto con nuestros lectores. 

J.P. : Soy lo que se suele denominar gata de Madrid de padres y abuelos madrileños y es la ciudad que me tiene enamorada desde 1985 que es cuando nací. Llevo toda la vida escribiendo de forma más o menos anónima por el puro placer de hacerlo, pero soy profesora de inglés, cuidadora de perros y coach y a lo largo de la vida he tenido muchos trabajos tanto en Madrid como en Londres adaptándome al momento vital en el que me encontraba. Siempre he utilizado la escritura como esa vía de escape que me hacía sentir bien para expresar aquello que la vergüenza que tengo desde que nací me impedía hacer o decir.  

J.M.: ¿Cómo nació la idea de querer escribir ‘Las malvas en mi piel’?¿Cuál fue la semilla que hizo que te decidieras a escribirla?

J.P.: La semilla como dices nació en la experiencia porque fui víctima de la violencia psicológica y física que está reflejada en ese libro y quise transformarlo en una novela narrada principalmente en primera persona analizando todo lo que tuve que pasar y cómo salí de ello.

J.M.: El primer capítulo que encontramos lleva por título ‘Aquel frío’, haciendo referencia al suelo, en el caso particular, al suelo frío y desgastado que mostraba el paso de los años. ¿Crees que es el primer elemento de toma de conciencia de los malos tratos?¿Qué puedes decir a nuestros lectores sobre ello?

J.P.:  Creo que ese suelo frío y algo desolador refleja lo que una mujer puede sentir cuando se ve envuelta en una situación de violencia física o psicológica porque te puedes encontrar sola ya sea por no querer admitirlo o no querer contarlo o incluso porque no te crean y al final estás tú enfrentándote al frío de la soledad

J.M.: ¿Cómo se te ocurrió la idea de que la pareja protagonista se conociera a través de que él va a su casa como representante de Ediciones Nuevo Mundo, para ofrecerle unos regalos que ya le habían indicado por teléfono anteriormente? ¿O es que es una una historia real?

J.P.: Es una historia real y quería reflejar la de esta forma porque representa que un acto fortuito puede tener consecuencias increíbles en unos casos podemos conocer a una persona maravillosa de la forma más aleatoria y en otros,  como es el caso de esta historia, a una persona horrible. 

J.M.: En la primera cita ella ve que en el coche lleva una silla de niño en el asiento trasero. El primer pensamiento es de que puede que fuera algo que ofrezca, pero él le deja claro que se trata del coche de su ex y de que la silla es de su hija de cuatro años llamada Paola. Ese día sabrá que tiene dos hijas. También conocerá el hecho de que sigue viviendo en la misma casa con ellas. Buscan un bar  en la zona de Huertas de Madrid. Beben cerveza y ella decide no ir de vuelta en el coche con él. Iba a ir en metro, pero luego decide caminar y tomar un café en un bar que encuentra en el trayecto. ¿Cómo una mujer que ha vivido sola y que parece tener las ideas claras se ve involucrada en una historia de amor tóxica como esa?¿Qué crees que ocurre? 

J.P.: Ese es justo el análisis que yo misma he tenido que hacer cuando por ejemplo mucha gente me decía que yo no daba el perfil de una mujer que hubiese podido sufrir ningún tipo de toxicidad o violencia psicológica y mucho menos física pero el caso es que no hay un perfil definido y le puede pasar a cualquier persona y hay dos ingredientes muy básicos en esta receta una es la falta de autoestima arrastrada a lo largo de los años y otro es el arte de convicción de otra persona es más fácil de lo que parece empezar poco a poco a aceptar esas famosas banderas rojas que 1 ve en un primer momento hasta que al final te ves tan inmerso que ya no sabes cómo salir y en tu fuero interno sigues queriendo intentar cambiar a esa persona motor de combustión y cuesta mucho aceptar que hay gente que nunca va a cambiar.

J.M.: ¿Por qué crees que a ella le parece bonito que aparezca en la fiesta de cumpleaños de su amigo Peter, en un bar tranquilo de Malasaña,  con una flor, cuando nadie lo ha invitado y que ha sabido dónde estaba por lo que había puesto en su Facebook, ya que ella no le estaba haciendo caso? Luego él con su palabrería molesta a sus amigos y queda mal ante ella, con lo cual ese primer gesto que a ella le puede parecer dulce, se desvanece. ¿Crees que muchas veces ocurren ese tipo de cosas cuando se trata de un controlador?

J.P.: Ocurre muy a menudo que esa persona controladora se disfraza de persona romántica con detalles que hagan sentir a su víctima muy especial e incluso que la conviertan en la protagonista el hecho de hacer regalos llevar flores o incluso utilizar palabras de amor exacerbado te hacen sentir muy especial y te van enamorando poco a poco aunque realmente estés siendo víctima de un engaño.

J.M.: Ella se acuesta con Javi, un chico que conoce, la noche del cumpleaños de Peter. A ella le gusta ese chico, pero él no le manda ningún mensaje al día siguiente y al aparecer J. de nuevo, pidiéndole ir a tomar un café, ella acepta. En esa cita ella puede darse cuenta de que él la espió y supo que se fue con Javi. Él ya tiene claro que están saliendo porque le hace una escena, cuando en realidad no es así. ¿Crees que es típico ese tipo de escenas cuando se trata de un maltratador?

J.P.: Es muy habitual en un maltratador pero especialmente si esa persona también es infiel porque piensa que su pareja va a hacer lo mismo que él está haciendo lo que se suele conocer como el efecto espejo y por eso quiere saber toda la información y tener controlada a su víctima porque no se fía.

J.M.: A pesar de todo lo acontecido anteriormente, existe la tercera cita, en la cual J. la lleva a cenar, y luego van a su casa donde se enrollan. ¿Crees que el ser buenos amantes es lo que hace que las mujeres se enganchen a pesar de lo otro que ven?

J.P.: Es lo mismo que comentaba sobre el enamoramiento el recibir atenciones ya sean sexuales o románticas o cualquier otro tipo de detalle te hace sentir muy especial y piensas que te están dedicando todo el tiempo y el esfuerzo para ti e incluso el dinero es una forma de agasajarte para que no te des cuenta realmente del círculo en el que estás entrando y sin duda la química sexual es importante.

J.M.: Una de las cosas que mejor reflejas en tu obra es el hecho de que él le hecha la culpa de todo en muchas situaciones para hacerla sentir culpable y controlarla. ¿Crees que es uno de los puntos que hace que se tarde en llegar a tomar la determinación de separarse?

J.P.: Claro porque cuando tú te sientes culpable te sientes también en deuda con la otra persona y quieres compensar entras en un círculo de hacer méritos para que ese hombre no te deje o no se vaya con otra e incluso intentas demostrarle que tú eres mejor que otras mujeres dejando de ser tú misma hasta el punto de maquillarte más o arreglarte más o cocinar o hacer cualquier cosa que pienses que le va a satisfacer porque cuando has llegado a ese punto lo único que te importa es que no te dejes sola. 

J.M.: El primer acercamiento de las niñas de él en casa de los abuelos, siendo ellas cariñosas con Juliette, le hace albergar esperanzas de formar una familia. ¿Crees que ese hecho también es una forma de mantenerte atada por parte de se tipo de hombres?

J.P.: Por supuesto y De hecho hay diferentes situaciones en las que una mujer se queda embarazada sin a lo mejor haberlo deseado del todo o se ve forzada o impelida a tener hijos porque se supone que es lo que debe hacer y no llega a ser una decisión cien por cien consciente al final los hijos son otra forma de atarte. 

J.M. : No quiero desvelar nada más de tu obra porque lo interesante es leerla en su totalidad y sentir las emociones que Juliette siente a lo largo del tiempo que dura la relación y de la decisión que toma. Quisiera sin embargo, a ser posible, saber si tienes en mente o ya iniciado un proyecto del cuál nos puedas adelantar algo. 

J.P.: Pues mira ahora mismo estoy dedicando toda mi atención a este libro a darle visibilidad y a participar en todas las charlas que pueda Así mismo sigo escribiendo mis poemas morados hablando de diferentes situaciones por las que pasa una mujer tanto infidelidad como autoestima toxicidad envidias etcétera son temas que menciono en estos poemas y es a lo que me estoy dedicando por ahora sí que tengo una segunda parte también orientada a la superación y al Renacimiento de 1 mismo pero todavía quedará un tiempo  

J.M.: Me gustaría que contaras brevemente a nuestros lectores algo relativo a tus otras obras, para que así tengan una idea de todo tu trabajo literario.

J.P.: Me centro en las emociones desde mi punto de vista y lo que he visto en mujeres que he conocido a lo largo de mi vida ya sea por motivos profesionales o personales creo que toda mi obra podría llevar el título de habla mujer porque a veces los grandes cambios simplemente necesitan una buena conversación y es ahí donde plantamos la semilla o damos el primer paso hacia la superación y el empoderamiento.

J.M.: Para finalizar, ¿qué añadirías a esta entrevista para redondearla? ¿Qué consideras importante y necesario que conste en la misma? 

J.P.: Ojalá que el mensaje que pueda transmitir sea el de seguir adelante y el de no callarse y el de hablar sin tapujos sin miedo y sin reparos por qué creo que El primer paso es el más difícil pero por siempre hay que empezar por ese primer paso que es contarlo muy largo que sea el camino siempre hay que empezar por dar ese primer paso.

                         Juana María Fernández Llobera